Todos alguna vez e incluso muchas mas de las que pensamos, nos
vamos para volver… y eso es algo que no podemos evitar. Es como el dicho que
dice “aquel que se va sin que lo echen vuelve sin que lo llamen”. Dejar un espacio a aquellos que todavía
tienen cosas que contar y ganas para hacerlo es lo mejor que se puede hacer
cuando ya estamos al límite y no podemos mantener la situación. Sé que ese
espacio que dejo lo cubre alguien y otra persona que se va me deja el espacio a
mi… para ahora volver a escribir.
Con este preámbulo doy comienzo a esto que se llama y
siempre se va a llamar Momentos en el espacio. Deseándoles un muy buen año
2014… que despidan este 2013 con la sonrisa más grande más allá de si fue
bueno o feo o el peor de todos. La magia recae en intentar comenzar de otra
manera. Y si no creemos en la magia siempre dicen que no hay mejor ser que
aquel que comienza todo con una sonrisa de oreja a oreja cueste lo que cueste.
Y este fue un año donde la sonrisa costo más que nunca y
costo darme cuenta que tan importante es y costo enfocar y ver que esas alas
que le vemos a aquellos que vuelan alto también las tengo yo. Es como cuando
vemos todas las cosas buenas en los demás y en nosotros solo vemos lo malo,
como si nuestra imagen se distorsionara y lo bueno solo pertenece a otros. Esas
alas están y muchas veces solo hace falta dejarlas crecer para que se abran
como nunca tuvieron oportunidad.
No me voy a preguntar ni tampoco voy a asegurar que este es
el año del despegue pero si me prometo a mí mismo continuar por este o por otro
camino pero siempre continuar.
Siempre un gusto escribirles a lo que leen, a la nada misma
o a mi mismo.
Interesante lo q dices... sobre todo con eso de las alas... estoy en una situacion q no las veo en mi, pero lo hare y volare...
ResponderEliminarCuidate y buen año para ti tambien
Erik